Siempre asi, repensando el futuro, tratando de continuar adelante, pensando que lo vendrá será mejor, intencionando. Pero nunca conformándose.
La vida. Cómo cansa la vida!!!
Un mar, como le dije a un amigo, donde te baña la ola de los encuentros y las alegrías y donde te golpea la ola de los desencuentros y la desazón y uno se queda tirado en la playa lleno de arañones y maltrecho.
Pero hay que recomponerse y seguir dándole el pecho a las olas porque vendrán muchas para bañarte con las águas benéficas de la amistad, del compañerismo, de las luchas compartidas, de lo bueno que se aprende. Y las que te golpean? Hay que encarlas también y ponerse cada vez más fuertes, no?
02 de abril de 2007
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